¡Hasta en los pueblos más alejados ya hay señal! Así ayudan las telecomunicaciones a mejorar la vida de millones de peruanos

Lima, Jun.5,2025.- Antes, en muchos pueblos del país, tener señal o internet era un sueño. Pero en los últimos años, la historia ha cambiado. Las telecomunicaciones —todo lo relacionado con celular, internet y tecnología— se han convertido en una herramienta clave para mejorar la vida de millones de personas, especialmente en zonas rurales donde antes no había cobertura ni para hacer una llamada. En el marco del Día Mundial de las Telecomunicaciones, es momento de mirar cómo la conectividad está transformando realidades en los lugares más alejados del Perú.

Tener internet ya no es solo para ver videos o chatear. Gracias a la conectividad, hoy muchas personas pueden:

● Estudiar desde casa con plataformas como Aprendo en Casa.

● Consultar con un médico sin tener que viajar horas, usando telemedicina.

● Recibir pagos con Yape o Plin y vender productos por redes sociales.

● Aprender nuevos oficios viendo tutoriales o capacitaciones en línea.

En Amazonas, por ejemplo, decenas de colegios rurales fueron conectados por primera vez en 2024, lo que permitió que cientos de niños accedieran a contenido educativo digital. En la sierra sur, comunidades altoandinas ya tienen señal 4G para comunicarse y navegar.

A pesar de ello, solo el 10% de hogares rurales tiene conexión fija, y la velocidad del internet en esas zonas sigue siendo baja en comparación con las ciudades. ¿La buena noticia? En los últimos cinco años se han instalado miles de torres y kilómetros de fibra óptica para llevar conectividad a rincones donde antes no llegaba ni la señal telefónica.

Y no se trata solo de hogares. También se han conectado escuelas, postas médicas, comisarías, plazas y municipios, facilitando el acceso a servicios públicos esenciales. Empresas como Gilat Perú han sido parte fundamental de este avance. Gracias a los Proyectos Regionales de Banda Ancha, más de 400 pueblos en regiones como Ayacucho, Huancavelica y Apurímac ya cuentan con internet 4G y Wi-Fi gratuito en espacios públicos. Esto ha beneficiado a más de 1.5 millones de peruanos.

“La conectividad no es solo un tema técnico. Es una herramienta de transformación que permite que comunidades enteras accedan a servicios, educación, salud y oportunidades económicas”, señaló Arieh Rohrstock, gerente general de Gilat Perú.

Superar los retos con propuestas desde el sector privado

Cerrar la brecha digital requiere enfrentar retos estructurales como la falta de incentivos, zonas de baja rentabilidad o problemas normativos. Para ello, es clave el compromiso del sector privado con propuestas concretas:

●Trabajar con gobiernos locales para facilitar permisos y reducir plazos administrativos.

● Promover modelos de negocio sostenibles para zonas rurales, incluso cuando la rentabilidad es limitada.

● Impulsar alianzas público-privadas que permitan ampliar la cobertura con visión social.

● Aprovechar mecanismos como obras por impuestos o servicios por impuestos para acelerar proyectos de conectividad.

“Desde Gilat apostamos por soluciones de largo plazo. Creemos que cada torre que se instala y cada red que se activa, debe ir acompañada de capacitación digital, apropiación comunitaria y visión de desarrollo territorial”, agregó Rohrstock.

Hoy, tener internet puede cambiar tu vida: estudiar, trabajar, vender, aprender y crecer. Las telecomunicaciones ya no son cosa del futuro, son el presente que muchas comunidades del Perú están empezando a vivir. Pero aún hay más de 3 millones de peruanos sin acceso a internet, y muchos otros conectados solo a través de señales lentas o inestables. El futuro de la conectividad en el Perú no depende solo de tecnología, sino de voluntad, alianzas y visión. Gilat Perú reafirma su compromiso con una conectividad que transforma vidas, reduce brechas y pone al país en movimiento.